¿TU GATO DEJÓ DE COMER?
12 SÍNTOMAS QUE PUEDEN INDICAR QUE TU MININO PADECE DE HÍGADO GRASO
· Para evitar esta enfermedad es importante ofrecer un alimento balanceado acorde a la especie, raza, edad y estado de salud de tu peludito, y ante cualquier sintomatología, llevarlo de inmediato al médico veterinario y no automedicar.
· Recuerda que si tu gato presenta cualquiera de estos signos, es importante llevarlo de inmediato al médico veterinario, quién procederá a realizar una valoración clínica completa, pruebas de laboratorio e instaurará una terapia de estabilización urgente, algunas veces colocando sondas de alimentación y realizando un tratamiento nutricional intensivo.
Esta enfermedad puede darse en cualquier raza y se presenta con mayor frecuencia en gatos adultos de mediana a avanzada edad, aunque se puede dar en cualquier periodo de la vida. En la mayoría de casos, lo vemos en gatitos con altos índices de estrés, obesidad, diabetes mellitus, cáncer, alteraciones de páncreas, riñón, entre otras
Para evitar esta afección, es importante ofrecer un
alimento balanceado acorde a la especie, raza, edad y estado de salud de tu
peludito, y ante cualquier sintomatología, llevarlo de inmediato al médico
veterinario y no automedicar. Los gatos siempre deben comer, si no lo hacen, y
pasan más de 12 a 24 horas debes ir por urgencias para que lo valoren.
El Dr. Carlos Cifuentes, médico veterinario de Pet Food Institute, menciona 12 síntomas que podrían indicar que tu minino padece de hígado graso o se encuentra en sus principios:
1.
No consumen alimento por
periodos mayores a 48 horas.
2.
Presenta vómitos.
3.
Depresión.
4.
Debilidad.
5.
Deja de jugar.
6.
se aísla o esconde.
7.
Su pelo se vuelve opaco o
se le cae más de lo normal.
8.
Pérdida de peso.
9.
Diarrea.
10. Mucosas o piel de color amarillo.
11. Salivación en exceso.
12. En algunas ocasiones, respiración agitada con o sin dificultad.
Recuerda que si tu gato presenta cualquiera de estos signos, es importante llevarlo de inmediato al médico veterinario, quién procederá a realizar una valoración clínica completa, pruebas de laboratorio e instaurará una terapia de estabilización urgente, algunas veces colocando sondas de alimentación y realizando un tratamiento nutricional intensivo.
Fuentes
· Valtolina, C., & Favier, R. P. (2017). Feline hepatic lipidosis. Veterinary Clinics: Small Animal Practice,
47(3), 683-702.
· Delaney, S.J; Fascetti, A.J & Elliott, D.A. (2007). Enciclopedia de la nutrición clínica canina: Nutrición canina en
cuidados intensivos. Royal canin Ibérica, S.A.
· PÉREZ, Enrique. (2007). Entender y tratar la lipidosis hepática felina.
Revista Complutense de Ciencias Veterinarias Cátedra Hill’s. Hospital Clínico
Veterinario. Dpto. Patología Animal II. Facultad de Veterinaria de Madrid
(España).ISSN: 1988-2688 RCCV Vol. 1 (2).
· Sánchez, E. y López, M. (2008). Revisión y actualización de la lipidosis hepática. Clínica Veterinaria Coso. Clin. Vet. Peq. Anim, 28 (3): 183-189. (Zaragoza, España).
Comentarios
Publicar un comentario